Cuando llegue el invierno gris y frío,
cuando cubra la escarcha la llanura,
te veré regresar con gran ternura
por la senda bordeando el manso río.
Cuando llegue el invierno y la nevada
y resbale la nieve en nuestro techo,
nuestra cálida hoguera y nuestro lecho
estarán esperando tu llegada.
Cuando el blanco sendero en la pradera
me señale las huellas de tus pasos,
pondré leña en el fuego de la hoguera...
Y saldré a refugiarme entre tus brazos.
Cuando acabe el invierno con mi espera...
iBeberé el dulce néctar de tus labios!
19 de Noviembre 2010
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